lunes, 16 de septiembre de 2013

Sus decisiones son nuestras gillotinas



Hola mundo, hace que no te escribía pero nunca te olvido, hoy la historia puede ser triste aunque yo ahora mismo este abatido por ella trato de mirarla con algo de optimismo.
Hoy decidí dar una vuelta por el ferial de Fuenlabrada para invertir algo de mi tarde después de cumplir con las tareas que me había encomendado para mi mismo esta tarde, todo transcurría entre la más absoluta normalidad, alguna compra por aquí alguna risa por allá cuando e visto una imagen que me ha cruzado la mente de un extremo al otro más negativo y lógico, la imagen es ver como un hombre de familia pide un trabajo o la voluntad porque no tiene para poder mantener a sus dos hijos, vale, hasta ahí todo más o menos normal, lo que me ha dejado pillado, pilladisimo es ver la cara de ese hombre mirando al infinito como pidiéndose a si mismo explicaciones de porque había acabado así, que había hecho él para acabar así, Creo que cuando una persona hace eso por pura y verdadera necesidad no tiene esa mirada ni esa angustia en su expresión corporal.
Esta situación me ha hecho reflexionar al instante con cierta impotencia para tratar de encontrar una explicación y lo cierto es que no e tardado mucho en encontrarla pero eso no a hecho más que enervar aun mas mis nervios al darme cuenta de que el culpable de su situación no es el sino un sistema creado por personas que solo se preocupan de sí mismos y de su beneficio personal por encima de cualquier otro valor, luego tienen la cara de pedir mas y mas sacrificios a la sociedad, una sociedad que ya no puede absorber más impuestos ni más recortes sociales, una sociedad al borde del caos y el colapso, no podemos depender de gobiernos que solo saben robarnos y hacer legal lo que es ilegal moralmente y viceversa amparándose en unos votos que consiguieron de forma corrupta.
Hablan de moralidad pero ellos y sus decisiones no solo son moralmente cuestionables sino que si se atuvieran a alguna clase de moral o ética desde luego no harían recaer sobre la sociedad oprimida y estrujada sus decisiones son nuestras guillotinas y esto no puede seguir así, bueno mundo no quiero aburrirte mas con mis debates internos (aunque estés para eso lo mucho aburre) asique me despediré hasta muy pronto que tengo muchas más letras que mostrarte, saludos!